DICHOSOS MIS OJOS
Amas, te aman y hay un fruto.
Sonríes, te ilusionas y agradeces.
Enamoras, te enamoran y hay un cielo.
Dichosos mis ojos que te miran desde lejos en tu gloria.
Amas, te gozan y hay un pedacito de ti.
Cantas, bailas y eres la mujer que tanto querías ser.
Enamoras, te idolatran y Dios no deja de bendecirte.
Dichosos mis ojos que alcanzan a verte.
Sin dudas ni tristezas.
Un corazón nuevo en tu pecho.
Sin llantos ni recuerdos tormentosos.
Una vida entre tus brazos.
Era cuestión de tener fe.
Confiar en ti misma y esperar la bondad.
Siempre supe hasta donde llegarías.
El verdadero amor lo consigue todo.
Valió la pena tu despedida.
Allá nada te falta.
No me arrepiento de ninguna noche que te lloré.
Rogué y rogué, y hoy brillas más que nunca.
Celebro tu presente y ansío mirar tu futuro.
Si alguien merecía un fantástico destino, eras tú.
Le aplaudo a Dios que te permita cumplir tus sueños.
Dichosos mis ojos que se percatan de tus dichas.
AUTOR: CARLOS ALBERTO SALGADO DÍAZ.